El Señor de los Anillacos

Pasaron dos semanas y Froto y Zam seguían de fiesta.

-Froto, malas noticias- dijo Zam.

-¿Que, que pasa?-pregunto Froto.

-Se acabo el vino- dijo Zam

No termino de decir esto y ya todo los Bobbits que estaban en la fiesta se habían ido.

-Pero ¿y ahora que hacemos?-pregunto y se lamento Froto.

-No se vos tenes manos, yo tengo ubre...-dijo Zam medio mimoso..

-Nien Pedo!-grito Froto.

-bue.. Podríamos ir a esa taberna La Poppys Pisadora- objeto Zam –por lo menos vino debe haber-

-Sale y vale, vamos pa’ ya’-dijo Froto a lo mejicano.

Zam y Froto agarraron una bolsa de Papa vacía y la llenaron de la comida que había quedado de la fiesta (cuatro rodajas de pan y seis porciones de torta).

Froto agarro un Bolso y guardo su ropa y el anillo.

Cargaron todo en sus espaldas y se emprendieron a la taberna.

Entraron en un bosque medio denso y aburrido, estaban cerca de elfos y elfas del bosque desnudas.

Vieron pasar unas bellas elfas desnudas tapadas con una fina y transparente seda, sus pechos eran hermosos y sus caderas que se bambolean de un lado a otro, con una gracia increíble encantando a Froto y a Zam.

Decidieron acampar en ese mismo lugar por razones obvias. Descargaron sus cosas y Froto coloco unas ramas al lado de un árbol en forma de carpa india, y Zam coloco un par de retazos de cuero rasgados y agujereados sobre las maderas y esa carpa cómoda, no dejaba de ser una choza de porquería y asquerosa. Era tarde y decidieron preparar algo de comer, Zam saco unas ollas de su equipaje y Froto descargo arroz y condimentos varios como alicante, pimienta, pimentón y le hecho un chorro de leche casera.

Luego de morfar como nunca, durmieron plasidamente, como quien diría, "...nada mejor que después de un estrepitoso sábado que un PLACIDO DOMINGO...".

(fragmento del diario de Froto que escribió a la mañana siguiente...)

“...Un cago de frío hacia esa mañana, tenia las patas congeladas, encima el boludo de Zam dejo la choza abierta, al parecer es sonámbulo, pues por la noche se levanto salió de la carpa y al parecer le hizo cosquillas a una elfa del bosque desnuda, a ella le agrado mucho porque decía –...mas, OH! si un poco mas... ah!-. Por suerte me dormí fácilmente, y pude aprovechar y comer las galletitas que tenia Zam en su bolso… jeje!, de lo que se perdió Zam.

Desarme la carpa antes de que se levantara Zam, por eso tuve que volverla a armar, pues el había quedado dentro de la carpa. Desayunamos huevos fritos de Dragón, papas en cuadraditos y hamburguejas al vapor, y por supuesto una buena leche tibia...”

(... continuamos con normalidad...)

Emprendieron el viaje, tomando el atajo por la Vinoteca de Alfonso.

De pronto ven salir de lo de Alfonso corriendo a Porrón y Morrón primos lejanos de Froto (eran lejanos pero de apoco se fueronle acercando a Froto y a Zam, pues estaban corriendo hacia ellos) con una decena de vinos y el viejo Alfonso corriéndoles atrás –Pendejos de mierda devuélvanme mis vinos... -.

Morrón y Porrón-perdónenos por los cinco Viña Añeja de la semana pasada y los siete Parrales de los tukitos, y los cuatro Damajuanas Gandulfo, y los nueve Chupandinos del Este, y sin olvidar los tres licores de menta de ayer y los cinco whiskis del jueves, y... el Vodkasha, la Pinga, y...-

Mientras seguían corriendo se acercaban a un barranco pero por suerte frenaron antes de caer, pero el viejo Alfonso por guacho que es, les tiro un cascote encima de sus cabezas, y ellos cayeron rendidos y estúpidos al barranco.

Luego de la caída, algunos vinos se habían roto, pero los borrachos de Zam, Porrón y Morrón empezaron a lamer el piso donde había quedado vino, mientras Froto se estaba saboreando los vinos que habían quedado sanos.

Froto, medio borracho, percibió que algo se acercaba –Escóndanse que viene algo-

Nadie le dio bola y se quedaron lamiendo el suelo.

Dicho y hecho algo se estaba acercando eran los Jinetes Grises.

Cuando Zam los vio acercarse a ellos les dio el aviso a los demás de que venían –Muuuuuu... evanse!- y se escondieron junto a froto, sobre un árbol.

Un Nazgul ya estaba allí, Froto y compañía se quedaron silenciosos... pero no resistieron tanto silencio, les había caído mal un salchichón que habían desayunado aquella mañana, tan mal que algunos de ellos tenían cagadera grave y comenzaron a tirarse gases (muy nauseabundos, por cierto, eran pedos Bobbits y eso significaba mugroso) el Nazgul ni se avivo, pero por las dudas Froto le revoleo un botellaso de vino, que lo dejo inconsciente y derrotado en el suelo ante la estupidez de nuestro supuesto Héroe.

Siempre era costumbre de que se dijera unas palabras heroicas después de una actitud con tanta intrepidez y astucia. Pues Porrón decidió decir las palabras –Queridos amigos, luego de este acto de tanta valentía y picardía yo quisiera remarcar que en estos tiempos difíciles no tendríamos que perder esta oportunidad única de... ¡¡¡ROBARLE EL DINERO!!!- los pequeños y picaros Bobbits no perdieron la oportunidad de robarle, que no le dejaron ni el caballo que tenia.

Mientras cabalgaban entre charcos y barro en el Valle del Agua de Cloaca Froto recordó una canción y se la puso a cantar:

La canción terminó.

-Y pa´que mierda lo decis Bolu´?!?!-dice sacado Morrón.

-¡Donde hay vino, donde hay!- canto Porrón en voz alta.

-¡Silencio, mi sentido mugroso me dice que oiga mejor!-dijo Froto Seriamente.

-¡Unos pasos!, ¿que serán...?- interrogo Morrón.

-deben ser……. Pieses!-dijo sabiamente Porrón.

-¡Elfos!- Grito Zam.

Eran Elfos y Elfas del Bosque Desnudas. Iban cantando, agudizando su oido Froto pudo distinguir lo siguiente:

¡Blancanieves! ¡Negralluvias! ¡Oh, denme algo de morfar!

Los Bobbits, como era de esperarse, se durmieron antes del fin de la canción.

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