NARRACIÓN 6ª

Y allí, el orco les guió en la oscuridad, por las rocosas paredes de la oscura habitación. Burzumgad, no tardo en subir a una meseta meseta que se abría ante una entrada sombría y rezumante de olor a humedad...
[quote]¿sería conveniente tomarla? ¿dónde nos llevaría?- pensó para sí el orco[/quote]
No obstante notó que el tiempo para las decisiones era escaso, y en ese momento los gritos de uruks parecieron hacer eco en todo el lugar.
[quote]¡Subid, rápido! ¡He encontrado un túnel!- dijo Burzumgad a toda la compañía.[/quote]
Toda la compañía subio rápido con miradas de confusión y algunos empezaban ya a cansar. Toda la compañía se adentró en el oscuro tunel, Burzumgad al frente y Rúmil en la retaguardia con el arco y una flecha en sus manos. Todos empezaron a notar que la oscuridad era total, y de hecho incluso a Burzumgad le costaba trabajo ver, y todos empezaron a trompezar con las piedras que había en el camino, y con cada paso el sonido del ejército sonaba más próximo.
De repente, la luz cegó a todos.
[quote]- Ah... esta luz... me está cegando...-dijo Serke tapándose con las manos. [/quote]
Sin embargo, solo fue un instante. Entonces todos vieron que habían salido del túnel, que era la luz del sol lo que les había cegado, y que habían estado a punto de caer por un gigantesco y peligroso barranco, además todos notaron que ya no había ventisca, y que podían ver todo claramente.
El peligroso y empinado barranco llevaba an amplio y gigantesco camino, lleno de charcos de agua. Tal vez antes hubiese sido un gigantesco y caudaloso río, pero ahora estaba sequísimo, y estaba siendo pisoteado cruelmente en ese mismo instante por los pies de grandes y negros uruks. El ejército era gigantesco, y Rúmil no llegaba a ver su fin, los cuernos y tambores sonaban por encima de los desgarradores gritos de guerra de los uruks. Todos se quedaron boqueabiertos ante el ejército; no eran decenas, miles de miles.
Por un momento Burzumgad creyó distinguir un estandarte con varios signos extraños; sin embargo, entre ellos estaba el ojo rojo de sauron, la mano blanca de isengard, una cara demacrada y una gigantesca serpiente roja atravesada por una cimarra orca.
[quote]¡Deprisa! ¡Volvamos al túnel! ¡Si nos ven estamos perdidos!- dijo Serke rápidamente.[/quote]
Rápidamente todos volvieron al túnel, era obvio que eran muchos para abatirlos. Pronto volvieron a descender para tocar el suelo de la oscura habitación.
[quote]- ¡Rápido! ¡Debemos de volver a atravesar el camino que nos llevaba hasta aquí en dirección contraria y ponernos a escalar antes de que nos vean! ¡Ahora que la ventisca no nos protege nos podrían ver! ¡Seguidme!- dijo el peregrino gris, y con un salto salió fuera de la habitación y rápidos como un ciervo que siente que va a ser cazado, corrieron detrás de él.
- Debemos de escalar muy alto para poder encontrar un lugar donde descansar y poder asi discutir la ruta a seguir...- masculló el peregrino, aunque todos asintieron con jadeos.[/quote]