Las hazañas de Lady Janet

05 de Febrero de 2004, a las 00:00 - Fëadraug Turmellyrn
Relatos de Fantasía - Relatos basados en la obra de Tolkien, de fantasía y poesías :: [enlace]Meneame

PRÓLOGO

Allí se encontraba, frente a la tumba del que fuese un gran guerrero, un Enviado de los Dioses... un amigo.
Una fuerte ráfaga sopló y cayó la capucha. El elfo ni se inmutó, no dejaba de observar la lápida, donde se leía:

Jean-Luc Ragnus, Templario de la Orden de Ghidnaar, Enviado Divino

Y las dos fechas estaban justo debajo:

Ghidnaar, 1 de agosto de 3260 después de la Gran Guerra –
Ghidnaar, 13 de septiembre de 3287 después de la Gran Guerra

La larga cola que recogía el castaño pelo del elfo ondulaba con el viento, al igual que su capa verde. Los ojos del elfo, de una extraña tonalidad verdosa, dejaron escapar unas pocas lágrimas, mientras murmuraba unas palabras en su lengua:
- Thal-jorsan, Gaehlia-hín ie mer dagorean tur, fëan no uin, cuor no bredan. Semp tan fëan ghidnû ferndas.

Lo cual traducido al Común significa:
- Poderoso jinete, hijo de Gaehlia y señor de mil batallas, de espíritu ardiente, corazón fuerte. Que tu alma encuentre la paz por siempre.

Y cubriendo de nuevo su cabeza con la capucha, el elfo se alejó de la tumba, caminando hacia donde estaba una elfa esperándole con dos caballos, ambos de color blanco, aunque lo curioso es que uno tenía riendas y el otro no. La elfa también iba con una capa, ésta de color marrón, cubriéndola, pero se le podían ver claramente los mechones pelirrojos.
- Kelin nes baren, Fëadraug? (¿Volvemos a casa, Fëadraug?) - dijo la elfa, mientras subía al caballo.
Fëadraug se acercó al caballo sin riendas y lo acarició suavemente. Luego miró a la elfa.
- Ia, Kelin nes baren, Jade, kelin nes baren (Sí, volvemos a casa, Jade, volvemos a casa) - y Fëadraug se montó en el caballo, antes de continuar -: Dagoren fines, mas mol veids gurthem (Esta guerra se terminó, pero se llevó muchas vidas) - hizo girar al caballo para observar las ruinas que había al fondo.
- Argoh rauko fairen iten, malaken iel, malaken! (El demonio Argoh lo hizo, ¡maldito él, maldito!) - respondió Jade -. Kel baren, mean kosan (Vamos a casa, esposo mío)
Y Jade empezó a cabalgar, mientras Fëadraug aún contemplaba el paisaje. Luego miró al caballo y volvió a acariciarlo.
- Echas de menos a tu jinete, ¿verdad? - comentó el elfo en Lengua Común -. No te preocupes, Silph, piensa en los momentos que vivisteis, fuisteis grandes compañeros, aunque no estuvieses siempre juntos - le dio unas suaves palmadas al caballo -. Y ahora, vayámonos, el camino es largo hasta el Reino Élfico.

Silph relinchó antes de seguir el mismo camino que Jade. Mientras, las primeras gotas de lluvia empezaron a caer sobre los restos de la ciudad de Ghidnaar, donde aún quedaban restos de los ejércitos del Caos que habían luchado hacía pocos días.


Aquella joven mujer se había acercado a las tumbas de los guerreros que perecieron en la batalla poco después de la marcha de los elfos. Bajo la lluvia, su camisa roja empezaba a mojarse sin remedio y las gotas de agua resbalaban sobre su espada envainada, colgada de su cintura. Paseaba observando las tumbas, leyendo en voz baja los nombres que figuraban en ellas. Se detuvo en la tumba de Ragnus y se quedó unos minutos observándola.
- Muchos de los que aquí yacen defendieron a un injusto imperio que no se preocupa por el pueblo llano - empezó a decir la muchacha -. Lucharon por defender los intereses de unos pocos, que parecían más preocupados en dar buena imagen y salvar sus riquezas que en defender al pueblo.
Se arrodilló y bajó la cabeza. El pelo, corto y castaño, cubrió su cara.
- En cambio, Sir Ragnus fue un hombre que luchó por todos, daba igual si eran ricos o pobres, si eran o no famosos. Esa distinción sólo la hacen los enviados de los Dioses. Y yo, aun no siendo elegida por los Dioses, sigo esos pasos. El ver a personas como Sir Ragnus me enorgullece del camino que he elegido en mi vida - se levantó, sin apartar su vista de la tumba -. Mis respetos, Sir Ragnus.

Luego miró a las ruinas de la ciudad.
- Ghidnaar... Destruída... Pero también cayeron muchos enemigos del Orden y ahora el mundo puede estar tranquilo... Al menos, por el momento - y tras coger un poco de aire, la chica comenzó su camino hacia el norte, dejando las ruinas de Ghidnaar y las tumbas a su espalda.



1 2 3 4

  
 

subir

Películas y Fan Film
Tolkien y su obra
Fenómenos: trabajos de los fans
 Noticias
 Multimedia
 Fenopaedia
 Reportajes
 Taller de Fans
 Relatos
 Música
 Humor
Rol, Juegos, Videojuegos, Cartas, etc.
Otras obras de Fantasía y Ciencia-Ficción

Ayuda a mantener esta web




Nombre: 
Clave: 


Entrar en el Mapa de la Tierra Media con Google Maps

Mapa de la Tierra Media con Google Maps
Colaboramos con: Doce Moradas, Ted Nasmith, John Howe.
Miembro de TheOneRing.net Community - RSS Feed Add to Google
Qui�nes somos/Notas legalesCont�ctanosEnl�zanos
Elfenomeno.com
Noticias Tolkien - El Señor de los AnillosReportajes, ensayos y relatos sobre la obra de TolkienFenopaedia: La Enciclopedia Tolkien Online de Elfenomeno.comFotogramas, ilustraciones, maquetas y todos los trabajos relacionados con Tolkien, El Silmarillion, El Señor de los Anillos, etc.Tienda Amazon - Elfenomeno.com name=Foro Tolkien - El Señor de los Anillos