Poesías

La Muerte de Aragorn

Hermoso príncipe de cálida luz,
Mi fuego encendiste
Y por siempre me has hechizado tú.

Mi vida te di,
Arrepentida no estoy,
Pero ahora sola me quedo,
Sin tu tacto, sin tu voz,
Vacía me siento yo sin tu calor.

Amado mío,
Mi eterno Señor,
Impaciente,
Espero reunirme contigo,
Al final de mi élfico resplandor.

Maravilloso ser,
De excelsa luz,
Tus ojos profundos,
Reflejan sabiduría y virtud.

Conoces el mundo,
Tus años me dicen,
Que un mar de virtud eres tú.

Hermoso elfo,
Mi príncipe perfecto,
Dame tu mano,
Dime que no es un sueño.

Amado ser,
Prométeme amor eterno.

Pedirte una sola cosa quiero,
Que si en este bosque,
Una vez más te encuentro.

Bésame, abrázame,
Y no dejes que despierte
De este maravilloso sueño.

Amada Tierra,
Tu magia me llena,
la luz que emites,
mi mente sosiega.
Escapar yo quiero,
Perderme en tu terreno,
Que me muestra el reino de los elfos,
Colmado de leyendas,
De aventuras y pasión,
Oh! Tierra mía,
Te siento tan cerca,
Que respiro tu pureza,
Camino por tus bosques,
Sigo los caminos.....
Pero algo me devuelve a mi mundo,
Y te desvaneces,
Mis ojos te buscan desesperados,
Y pasa un tiempo.......
Y me calmo.......
Ahora cierro mis ojos otra vez,
Y apareces ante mí,
Mi corazón palpita,
Tan fuerte que mi alma se estremece,
Veo a los Istaris, seres sabios,
A los hobbits celebrando un nuevo amanecer,
A los hombres renaciendo,
Con un Rey que con justicia gobernará,
A los enanos, sorprendentes artesanos,
De corazón valiente y un temple omnipotente,
A los elfos, que aunque parten de esta Tierra,
En mi mente y en mi corazón permanecen,
La tristeza me inunda,
Al saber que yo también he de regresar,
Dejar mis sueños y mi felicidad,
Pero al pensar en ti,
Oh! Arda,
Mi esperanza renace,
Y sigo luchando,
Buscándote, amándote,
Y seré feliz,
En el momento en que te vea frente a mí,
Y no te vuelvas a ir,
El día que te quedes conmigo y yo en ti,
Ese día llegará,
Me quedaré dormida sí,
Y sueño no tendrá fin.