|
|
|
|
LAS DOS TORRES ayssss (17 de Junio de 2003, a las 18:31)
"Comoo en todo, hay que hallar la justa medida: el marketing es bueno hasta cierto punto, y beneficioso, pero la debilidad es nuestra, y los culpables somos nosotros. Nos volvemos vagos, como dices, y tragamos la hamburguesa de pollo cuando dos calles más para allá podemos comer el cocido. ¿La culpa es del marketing?"
Si, la culpa es del marketing. Gracias al marketing, yo tengo que pagar 12 euros por el cocido, y 4 por la hamburguesa. ¿Porqué? Porque la mayor parte de la gente se vuelve vaga con el marketing, termina prefiriendo la hamburguesa, que se lo venden como algo rápido y barato; como el del cocido vende menos, lo tiene que poner a más precio, y termina indirectamente jorobándome a mi (y jorobándose ellos mismos porque el cocido es más sano). Está claro, nosotros tenemos el control, pero no como individuos, sino como masa; y la masa, por desgracia, es tonta, tan tonta como el más tonto de sus componentes. Uno a uno todos somos razonables e incluso inteligentes, pero como masa no razonamos. El que controla a la masa y "le da lo que quiere" es el amo; y eso es muchas veces el marketing, pan y circo.
Es como si en el colegio, en vez de obligarnos a leer el Quijote, aprender matemáticas o estudiar fÃsica, nos animaran a leer un tebeo de Snoopy, usar la calculadora o hacer burbujitas de jabón porque es más cómodo y se ajusta a unas necesidades que nosotros tenemos; es verdad, pero una verdad a medias... Si asà fuese, adios a la evolución, adios a la cultura, adios a nuestra capacidad intelectual.
Yo no veo mal que la gente publicite sus productos, es algo que ha existido siempre; pero el marketing no sirve solo para hacer publicidad, sirve para "implantar", ese verbo tan hermoso que, cuando es pronunciado por algún experto en el tema suena tan horrible. El marketing es como Sauron: se aprovecha de nuestras debilidades, nos da bonitos anillos de colores que REALMENTE queremos, pero de los que acabamos siendo vÃctimas. El que más o el que menos quiere un coche, una casa, una play station, un ordenador, la mejor ropa, ser el más guapo y el más guay, igual que en el siglo XVI todo el mundo querÃa tener un hijo cura, una bula papal, un buen puñado de tierras y los mejores ropajes y perfumes. Gran parte de las necesidades y costumbres de esa época venian marcadas por el ferreo control eclesial, igual que gran parte de las necesidades y costumbres del siglo XX y del actual han sido marcadas por el marketing; no hace falta más que abrir un libro de historia o sociologÃa del siglo XX para comprobarlo. Vuelvo a repetir, no veo mal la publicidad, si veo mal la "implantación", y de eso va el marketing.
Un saludo
Elladan
| No está dado de alta, o tiene registro antiguo |
|
|
|
|
|
Por favor, inicie sesión para poder participar en el foro
|
|
|
|
|
Este foro tiene como tema las
películas de El Señor de los Anillos, El Hobbit, fan-film y similares, siempre inspiradas o basadas
en la obra de Tolkien. Están prohibidos mensajes que no tengan una relación directa con el tema.
Si dejas un mensaje que no corresponde será movido o
eliminado según el caso. Tienes otros foros dentro de Elfenomeno donde seguro que tiene cabida tu mensaje.
|
|
|
|
¿Tienes dudas, quieres saber más sobre Tolkien y su obra? Pues visita las famosas FAQ de ElFenomeno.
Respuestas a las preguntas frecuentes (y no tan frecuentes) que muchos nos hemos hecho sobre la obra de Tolkien.
|
|
|
|