Absolutamente apabullante. No encuentro otra forma de describir el octavo y último vídeo de producción de la primera parte de El Hobbit que nos presenta Peter Jackson. Usando como excusa la Comic Con, aprovecha para regalarnos algunas imágenes que os dejarán boquiabiertos (¿Alguien ha dicho "Gigantes de Piedra"?) para dar paso a los últimos cinco días de rodaje, muchas despedidas, comentarios emocionantes y mucho, mucho trabajo detrás de las cámaras. Además, nos muestran tres lugares que no esperábamos ver hasta el día del estreno: Rhosgobel (el hogar de Radagast), la casa de Beorn, y la Ciudad de Valle. Realmente impresionante todo ello. Por supuesto, del aspecto de Radagast, Beorn o los hombres de Valle no se ve nada, pero aún así, muchos lo encontrarán revelador... y sin embargo, resulta difícil resistirse a ver todo este detalle.
No os entretenemos más. Aquí lo tenéis. Si lo podéis poner en HD (a 1080p) lo disfrutaréis en todo su esplendor:
Como colofón, también se ha publicado en español el teaser poster de El Hobbit en español. Lo tenéis aquí
En el E3 se ha presentado un trailer del nuevo juego de El Señor de los Anillos, War in the North, que es realmente espectacular. Por lo que se ve, se trata de un nuevo juego en el que formar una compañía donde podremos ser elfos, hombres o enanos, pero en el que también podremos contar con la ayuda de un Águila, a la que primero tendremos que liberar, para que nos ayude a derrotar a orcos, trolls y hasta un Gigante de Piedra.
He tenido la oportunidad de presenciar en París la Avant-Première de "El Hobbit", y estas son, de forma muy resumida y aún sin digerir, mis impresiones generales y carentes de Spoilers.
Tras casi tres horas de hobbits, magos, enanos, orcos y wargos (sobre todo wargos, demasiados de esos), no puedo evitar salir del cine con una extraña sensación de déjà-vu y los ojos picajosos. Antes de nada, despejo dudas: mi visionado ha sido en 3D a 24fps, y no me importa el número de fotogramas que pongan o quiten, pero ya estoy echando de menos mis 2 Dimensiones, sobre todo por ver las cosas con la tranquilidad y definición que se merecen, más allá de la profundidad que les falte o les sobre. Pero sobre esto ya se ha hablado demasiado.
Debo aclarar que aquí no va a haber spoilers. Por la simple razón de que no hay gran cosa en la película que no sepamos ya o que no hayamos visto en la trilogía anterior. Los primeros “homenajes” o “guiños” en forma de banda sonora reconocible o frase recurrente son acogidos con una sonrisilla. Al cabo de tres horas de polillas que llaman a las Águilas, príncipes que cercenan extremidades enemigas a cámara lenta, escenas Gandalf-Bilbo calcadas de algún momento Gandalf-Frodo (música y encuadre incluidos) y demás copias de la trilogía original… simplemente se echa de menos ver algo nuevo.
La simpática presencia de Radagast y el Rey Goblin se agradece precisamente por eso, porque no nos recuerdan a nada que hubiéramos visto antes, algo que no salva a Thorin y Azog (este último pierde el premio a peor CGI de la película frente al gloss de Frodo y el botox con tupé de su anciano tío). Freeman y Serkis, chapeau, aplausos, reverencias y besos en los pies. Cada segundo suyo en escena resulta una delicia, no les sobra ni una coma.
Resumiendo muy mucho, y a falta de digerirlo todo y acoger con entusiasmo los 48fps en cuanto tenga la oportunidad, me da lástima haber esperado una película nueva y haber recibido 2 horas de material ya conocido o sin sal. La excesiva confianza en los efectos especiales han convertido a los flashbacks y los wargos en simples escenas trepidantes sin demasiado sentido (gran excepción aquí para la BESTIAL pelea de Gigantes de Piedra, la perfección hasta el dolor de Acertijos en la Oscuridad y la muy bien salvada, si bien interminable, Ciudad de los Trasgos).