El viaje del Libro Rojo

Capítulo VII: El Libro del Anillo

Me desperté en una blanca cama. Estaba en una pequeña habitación, con una hermosa puerta de madera. Me asomé a la ventana, estaba en Minas Tirith.

-¿Es que no te has dado cuenta de mi presencia, Bill? –dijo una voz a mi espalda.

Me gire. E l Rey Elessar estaba delante de mí.

-Es un honor conocerle, señor –le dije.

-El honor es mío –me contestó.

Le empecé a hacer preguntas acerca de la batalla y el Libro Rojo.

-Ganamos la batalla –me contestó-. Ningún Haradrim quedó vivo. Ahora el Reino de Harad es una provincia de Gondor. En cuanto al Libro Rojo, mi viejo amigo Tom Bombadil me lo entregó, y en estos mis momentos mi gente está haciendo una copia de este.

-¿Qué tal esta Tom, y Mívewyn? –le pregunté muy nervioso a Aragorn.

-Ambos están bien, sobre todo Mívewyn.

Aragorn me contó que estuve una semana sin conocimiento, en la que ocurrieron muchas cosas. Una de ellas fue que Mívewyn se enamoró de un joven guerrero llamado Anselon. Resultó, que Anselon salvó a Mívewyn del golpe de un Haradrim durante la batalla. Una semana después, Anselon y Mívewyn se casarón. La boda se celebró en La Ciudadela. En ella estuvieron presentes la familia de Anselon, los Reyes de Gondor y Elfwine, junto con varios amigos de la novia (incluidos Tom Bombadil y yo). Más tarde, Mívewyn se convirtió en doncella de la Reina Arwen, como Antaño fue mi madre. Estuvimos en Minas Tirith cuatro semanas. Aragorn, me forjó una espada de mi tamaño, ya que Hornamén acompaño a la tumba al gran Krukshun. La llamó Curim. En ella, escribió unas letras élficas que decían: “Yo soy Curim, Martillo de Haradrim. Todo Haradrim temerá a mi hoja de fuego”. El tercer día de la última semana que permanecimos en Minas Tirith, Aragorn se reunió con migo.

-Ya lo hemos terminado –me dijo Elessar mientras me enseñaba un libro de tapas rojas de cuero, con el Árbol de Gondor en la portada-. Mis hijos lo llaman “El Libro del Anillo”, así que lo llamaré así. Ha, se olvidaba, esto te pertenece.

 En se momento, me entregó el autentico Libro Rojo. Estaba manchado de sangre, ya que luche con el en la batalla contra los Haradrim.

El domingo por la mañana, Tom Bombadil, Gordo Terronillo y yo partimos hacía el oeste. Pero, antes de partir, nos reunimos con Elessar en la Torre Blanca.

-Nuestro senescal quiere verte, Bill –me dijo.

Entre en la Torre Blanca, y allí me encontré con un viejo de barbas blancas de al menos cien años. Era Faramir, el senescal de Gondor.

-Es un honor para mí conocerte, Bill –me dijo con su voz ronca y temblorosa-. Conocí a tu abuelo. Era una persona muy noble, mi querido hobbit.

Y al finalizar estas palabras, me abrazó. Más tarde, después despedirnos de Aragorn, la Reina Arwen me dio un beso en la frente y me dijo Namarië Bill. Mívewyn apareció de repente en la sala, me abrazó y echó a llorar.

-Os echaré de menos –nos dijo Mívewyn-. Nunca os olvidaré.

-Siempre podrás venir a visitar a mi querida Baya de Oro y a mí al Bosque Viejo –la dijo Tom. Mívewyn echó a herir y le abrazó.

-Tom, esto es para ti –le dijo Mívewyn a Tom Bombadil entregándole una flor Blanca-. Es Simbelmynë, una flor típica de Rohan. La podrás plantar en tu bosque.

-Muchas gracias, Mívewyn –la dijo Tom.

-Y esto es para ti, Bill –me dijo mientras me entregaba una espada-. Mi vieja espada. Quédatela.

-Gracias Mívewyn –la dije.

Me descolgué del cuello el colgante que me regalo Gimli, y se lo di.

-Toma Mívewyn, es mithril –le dije a Mívewyn.

-Gracias Bill. Que tengáis suerte en vuestra vida –nos dijo Mívewyn.

Con esto se retiró.

-Nos volveremos a ver, Bill –me dijo el Rey Elessar. Después, se alejo.

Tardamos varios meses en llegar al Bosque Viejo. Cuando llegamos al Bosque Viejo, me despedí de Tom Bombadil y le pregunte:

-Tom, ¿por que accediste a acompañarme en cuanto te dije mi nombre? –le pregunté a Tom Bombadil.

-Bill, desde que me dijiste tu nombre, supe que reas nieto de Samsagaz Gamyi, al que tengo un gran aprecio. No quería que le pasara nada a su nieto –me contestó Tom Bombadil. Después me abrazó.

Me despedí de Tom Bombadil, y me adentre en La Comarca. Primero pase por Bolsón Cerrado, para visitar a mis abuelos. Le conté a mi abuelo Sam toda mi aventura, y se sintió muy orgulloso de mí. Después, fui a Torres de Abajo, a la casa de mis padres. Allí espere hasta que tuve que partir hacia un nuevo sitio.