El Señor de los Armarios

Capítulo IX: El Río Grande.

Boromir: ¿GRANDE? ¿RÍO GRANDE? SERÁ RÍO SECO.

Efectivamente, Boromir tenía motivos para estar "cabreading", porque después de salir de Jarlórien y dar la vuelta a un recodo del río, se encontraron con el río más seco que ha existido y existirá en los anales de la historia.

Argón: Vaaaaaaaaaaaamos, vaaaaaamos, no desesperes. Ya mismo terminamos de empujar. ¿No oyes el sonido de las aguas bravas?
Boromir: ¿Qué?
Argón: Ignora la pregunta.
Boromir: NO, NO HE VISTO "LA MARABUNTA" ¡LLEVAMOS 30 HORAS EMPUJANDO LAS BARCAS Y NO HAY FORMA DE MOVERLAS!
Argón: Tal vez si le pidieras a Merry y a Pippin que se levantaran de la barca, a lo mejor se te haría más fácil arrastrarla.
Merry: ¿Qué? ¿Es a nosotros? ¡Anda Pippin! ¡Que están empujando la barca y nosotros aquí sin ayudar!

Pero Pippin no respondió pues se encontraba dormido. Frodo fue el único que ayudó, si se le puede llamar ayudar a ir diciendo: "Vamos, chicos, vamos, eso es, así, así" mientras iba comiendo un Bollicao. Sam tampoco es que ayudara mucho, porque tenía miedo a romperse una uña, y claro, acababa de hacerse la manicura con Haldir en Jarlórien.

Argón: Bueno, ten en cuenta el Plan Hidrológico. Están cogiendo el agua del río este para llevarlo a la Ciudad del Lago.
Legoland: Quillo, tú no te preocupeh, tu veráh como acabamoh pronto.

... 4 horas después...

Boromir: ¿No habéis notado nada extraño?
Gimli: ¿El qué?
Boromir: No sé, acabo de tener una sensación de déjà vú.
Legoland: Ezo zinnifica un fallo en Matrih.
Boromir: No, no, digo que veo los mismos árboles, las mismas piedras, el mismo paisaje...
Argón: Sí, claro (silencio sepulcral) ¡Aaaaah! Que va con sarcasmo.
Boromir: SIIIII. LLEVAMOS CUATRO HORAS EMPUJANDO Y NO NOS MOVEMOS DEL SITIO.
Gimli: Tranquilo, he notado que ha cedido un poco.

...7 horas después...

Boromir: (A Frodo y Sam)¿Habéis terminado con eso?
Frodo: Sí, creo que ya está.
Legoland: Vale, tú coge por aquí y vuzotroh por allí.

La Comunidad (menos Merry y Pippin, por supuesto) cogió un ariete que se habían fabricado allí mismo para poder mover la barca. Así que una y otra vez se dedicaron a empujar la barca con el instrumento, a ver si así podían hacer algo.

Boromir: ¡VAMOS! ¡NOTO QUE CEDE!

...2 días después...

Boromir: Llevamos dos días en el mismo sitio... por favor, algo de caridad... Señor bendito, haz que se mueva un poco. Soy un machote, tengo que mover la barca.

En ese preciso momento, Pippin despertó de su sueño, pues aprovechó que estaba en aquella cómoda balsa para dedicarse a dormir durante aquellos días que estuvieron intentando mover la barca.

Pippin: Bueeeeeeno, creo que ya podré quitar el ancla.

Efectivamente, Pippin había echado una pequeña ancla al río, alegando que no se fiaba de que se fueran sin él mientras habían hecho un alto dos días atrás en un recodo para descansar. Por supuesto, la reacción de Boromir fue de comprensión y amor.

Boromir: (Cogiendo del cuello a Pippin) ¡¡¡¡AAAAAAAAAAARRRRRRRRRRRRRR!!!! ¡¡¡MISERABLE SANGUIJUELA!!! ¡¡¡RATA INMUNDA!!! ¡¡DOS DIAS AQUÍ CON UN LUMBAGO IMPRESIONANTE Y TÚ ECHASTE UNA MISERABLE ANCLA!! YO TE MATO.
Frodo: (A Argón) ¡Qué raro está este, ¿no?! Para mí que el Armario le está poseyendo.

Era ya tan tarde, que decidieron no partir ese mismo día, sino permanecer allí y descansar. Mientras montaban la fogata y Sam sacaba su guitarra para cantar las canciones que aprendió en los Boy Scout, Boromir y Argón vieron una sombra en el río que se movía.

Boromir: Argón, ¿qué es eso?
Argón: Parece un tronco con brazos.
Boromir: ¿Cómo dijiste que se llamaba este río?
Argón: Guadalhorce.
Boromir: ¡Ah! Entonces no te extrañe que sea un tronco que ha mutado y le han salido brazos
Argón: Sí, bueno, aunque se parece un poco a Gollum.
Boromir: Pues sí. Oye, ya que estamos aquí, ¿por qué no llevamos el Armario a Cóndor? Al fin y al cabo, nos pilla de camino.
Argón: Mmmm... va a ser que no. Es que puede traer muchos problemas.
Boromir: Andaaaaa, andaaaaa, veeeengaaaa, no seas borde.
Argón: (CON ENFADO) NO ACERCARÉ EL ARMARIO A MENOS DE 300 KILÓMETROS DE TU CIUDAD, ¿TE ENTERAS?
Boromir: (Suplicando) ¡¡Lo siento!! ¡Perdón! ¡No era mi intención!
Argón: Está bien, te perdono hijo mío. Hoy recibirás doble ración de alfalfa.

Se embarcaron de nuevo en las lanchas motoras y se dirigieron hacia Jamón-Hell, donde harían un pequeño descanso. Justo a la entrada de Jamón-Hell, en la orilla del río, dos grandes estatuas se alzaban en cada orilla, fabricadas por antiguos hombres. Tenían un brazo alzado hacia adelante, apuntando a los viajeros y con una pose que parecían Diana Ross y las "Supremes" cantando "Stop in the name of love". Estas estatuas eran las de los antiguos reyes, Braun y Silkepill (más conocidos como Elendil y Anárion), antepasados por supuesto de Argón. Cuando llegaron a la altura de las estatuas, Argón llamó a Frodo, quien, como de costumbre, no dejaba de roncar.

Frodo: (Soñando) No, mamá, no dejes que Sam entre en el cuarto...
Argón: Frodo, despierta.
Frodo: (Despertando) ¿Eh? ¿Qué?
Argón: Mira, los Márinath. Largo tiempo he deseado contemplar a los reyes antepasados, mis parientes.
Frodo: ¿Tenías ganas de ver a unos muertos?
Argón: No te pases que era mi familia.
Frodo: Sí, bueno, pero son momias...

Entraron pues entre aquellas dos estatuas. Y mira que había espacio, pero Legoland y Gimli no se dieron cuenta y se chocaron contra el pie de una de ellas. Pero vamos, pasando ese incidente, decidieron acampar un día más después de haber estado navegando. 

Capítulo X: La disolución de la Pandilla
Después de pasar las grandes estatuas llegaron a una pequeña bahía con un embarcadero, en la que acamparían esa noche. Más adelante estaban los saltos del Rauros, unas enormes cataratas, por lo que no era plan de continuar por allí. Por esa razón, Argón tenía ahora que decidir la ruta para tomar.

Argón: Ojalá Gandalf estuviera aquí... se llevó la guía Campsa con él.
Gimli: Bueno, ¿y qué plan tienes?
Legoland: Ezo quiero zabé yo, porque no es por ná, pero esta orilla del río me gusta muy muy poco.
Argón: Pues mira, tenía pensado que lleváramos las lanchas a cuestas hasta que bajáramos esas cataratas y luego seguir unos cuantos kilómetros.
Pippin: Espera, espera... ¿otra vez cargar con las barcas?
Merry: ¿Pero y tú de qué te quejas, si no has hecho nada aun en este viaje?
Gimli: A ver, pero es que esa ruta que tú dices nos lleva a una cadena montañosa con picos afilados que después viene a salir a un apestoso pantano.
Argón: Pues sí. ¿A qué es toda una aventura?
Legoland: Ademáh, no zé de que te preocupah, si es Frodo el que tiene que ir cargao como una mula con el Armario...
Argón: Por cierto, ¿dónde está? ¿Y dónde se ha metido Boromir?
Merry: Se habrán ido a "meditar".
Pippin: ¿Y se han llevado todo el papel? Porque ahora después tengo que ir yo.

En ese momento de la conversación, Sam, que había estado todo el tiempo sentado en una esquina escuchando, se levantó de un salto al oír que no estaban Boromir y Frodo, comido por los celos, porque no podía ni imaginarse que hubiera algo entre el sordeta y su amo.
Pero en realidad Frodo había ido a meditar (pero de verdad, no lo que pensaba Merry). Se había internado un poco en la espesura del bosque cercano para buscar algo de soledad para pensar... y de paso fumarse un porro sin tener que compartirlo. No quería seguir adelante en este viaje llevándose a sus amigos tan lejos de casa, así que estaba decidido a fugarse con el Armario, y después venderlo por Internet en alguna subasta. Con el dinero que sacase se podría comprar un chalecito en las Tierras Imperecederas, y viviría a todo tren con el dinero sobrante, que pensaba invertir en el narcotráfico. Mientras pensaba estas cosas se encontró con Boromir, que estaba recogiendo flores.

Boromir: Ninguno deberíamos andar solos por estos sitios. Y menos tú, con lo que llevas a cuestas. Sé por qué buscas soledad. Sufres día a día. Se te nota. ¿No estás padeciendo sin necesidad?
Frodo: Uff, tal vez. Pero es que ya no sé qué hacer contra las hemorroides. Llevo mucho sufriendo en silencio.
Boromir: Pues prueba Hemoal, y si no, a ver si te puedes buscar alguna pomada hecha con aloe, que seguro que también sirve para eso.
Frodo: Ah, pues gracias por el consejo.
Boromir: Y hablando de otra cosa... ¿me prestas un rato el Armario?
Frodo: (Alejándose) ¡No! Ya sé cómo sugerirías usarlo, pero nadie puede dominarlo.
Boromir: ¿Por qué huyes? No voy a robarte.
Frodo: (Alejándose más) ¡No eres tú mismo!
Boromir: (Alcanzando a Frodo y agarrándolo del cuello) ¡Dámelo niñato! ¡Dámelo! ¡Debería ser mío! ¡Te llegó a ti de chorra!

En ese momento Frodo agarró una rama seca y se la estampó a Boromir en la cabeza, tras lo cual salió huyendo de allí, mientras el sordeta se quedaba en el suelo mareado. Corrió hasta lo alto de una loma, donde había una vieja construcción de piedra desde la que se veía toda la bahía. Unos minutos después apareció Argón buscando a Frodo.

Argón: ¡Frodo! ¿Dónde estabas? Sam está como loco buscándote.
Frodo: (Alejándose) ¿Tú también quieres robarme, so chorizo?
Argón: No, yo juré protegerte.
Frodo: ¿Y destruirías el Armario así como así?

De repente del Armario empezó a salir una luz rosácea y se escuchó el suave murmullo de la música de Village People y una voz susurrante que llamaba a Argón por su nombre. Estaba siendo tentado. Pero se acercó serenamente, cerró las puertas del Armario, y echó la llave.

Argón: Hubiera ido contigo hasta la Carpintería del Pepino... Por cierto, ¿es normal que tu espada brille?
Frodo: Pues no, solo pasa cuando hay orcos cerca.
Argón: En ese caso... ¡CORRE FORREST, DIGOOO, FRODO!

Frodo salió por patas y cuando Argón se dio la vuelta se encontró de frente a un ejército de Uruk-hais que ya les habían dado alcance y venían dispuestos a llevarse el Armario. En ese momento aparecieron por allí Legoland y Gimli, que habían ido a dar un paseo y al ver el plan los tres se unieron e la lucha. Obviamente, como son los héroes, no pueden morir, y cuando ya se habían despachado tres docenas de Uruks escucharon el sonido de un cuerno.

Argón: ¡Es el Cuerno de Cóndor! ¡El Cuerno de Boromir!

Y con estas palabras los tres salieron corriendo siguiendo el sonido del cuerno. Mientras tanto Merry y Pippin habían visto la que se había liado y se escondieron en un arbusto. Desde allí vieron que Frodo estaba huyendo del lugar con el Armario a cuestas, y decidieron no impedírselo, porque ya se estaban cansando de los marrones en los que los había metido. Cuando por fin salieron del escondite vieron que unos Uruks se habían dado cuenta de su presencia y los perseguían. Entonces Boromir se lanzó sobre los orcos para defender a los chiquitines. Claro que los susodichos, en vista de que ya había alguien haciendo el trabajo sucio por ellos, estos se pusieron a tirar piedras a una charca cercana para ver quién hacía más ranas mientras Boromir se partía los dientes a bocados contra los Uruk-Hai. Sin embargo, en un momento de descanso que se tomó (porque se había cargado él solito a veinticinco orcos sin ayuda y, claro, eso cansa), algo pasó zumbando por el aire y se clavó en el hombro del hombre de Cóndor: una flecha que provenía de un Uruk-Hai. Boromir se quedó un poco pillado de momento, pero después recapacitó y comenzó a hablar al Uruk-Hai.

Boromir: No, no, no, mire usted. Eso está muy mal, disparando sin avisar. ¡Qué poca vergüenza! Y además, usted y... un momento. Eso que estás sacando es una... No, no creo que estés dispuesto a volver a lanzarme una de tus...

Pues sí, el Uruk-Hai le lanzó otra flecha, justo en medio del estómago. Boromir se quedó de piedra, pues aquello le tuvo que doler (vamos, eso le duele hasta al menos pintado). De nuevo, Boromir se levanta.

Boromir: Si yo sabía que no se podía confiar en gente como usted. Si la Tierra Cuarto y Mitad va bien, váyase señor Hai, váyase. Mire, o me avisa cuando me tira una flecha para esquivarla, o no me tire la flecha, pero a traición, eso no se hace.
Uruk-Hai: ¡Muere ya, humano insensato!
Boromir: ¿Qué? ¡De eso nada! A mí nadie me da órdenes. Soy hijo del Marisco de Cóndor. Yo hago lo que a mí me da la gana y no...

De nuevo, otra flecha cruzó el corazón de Boromir, quien cayó definitivamente de rodillas en el suelo, esperando la llegada de su muerte. Merry y Pippin, al verlo, salieron corriendo hacia el moribundo. El sufrimiento los corroía profundamente.

Pippin: ¡MERRY! ¡BOROMIR HA CAÍDO!
Merry: Sí, eso veo. Corre, vayamos hacia él antes de que se lo lleven los Uruk-Hai.
Pippin: Eso, eso, que la cadena que lleva de oro es valiosa y podríamos sacar una pasta. Llevémonosla antes de que se la vean los bicharracos esos.
Merry: Y acuérdate del cuerno que vale una fortuna.

Pero antes de que los hobbits pudieran llegar a saquear a Boromir, otros Uruk-Hai que iban haciendo maratón se los llevaron, sin tocarlos tal y como Saruman había ordenado. Pero para Boromir no iba a ser el final...

Boromir: ¿OS LO LLEVÁIS? Joooo, yo quería deshacerme de ellos, era mi propósito en esta vida. Bueno, no nos desviemos. Como te iba diciendo, señor Hai... ¿puedo llamarte "Hai"? ... esperaba a que por lo menos tuviera un poco más de dignidad a la hora de lanzar una flecha, que por cierto tiene un hermoso color negro.

El Uruk-Hai, harto ya de tanta cháchara, le tiró otra flecha a Boromir, pero no se contentó con eso, sino que además cogió el carcaj y empezó a golpearlo con él, hasta que Boromir yació muerto.

Boromir: (Levantándose) ¡Hablando de negro! ¡Hay que ver lo que ha pasado con el Prestige! ¿Quién lo iba a decir? Porque claro, a ver ahora quién se responsabiliza de...
Uruk-Hai: (Agarrándolo del cuello) MUEREEEEE, MUERE YAAAAAAA. CÁLLATE DE UNA VEEEEZ.
Argón: (Llegando al lugar de los hechos) ¿Qué jaleo es este?

Argón vio entonces a Boromir hecho un colador, y al lado al Uruk-Hai intentando rematarle.

Argón: (Esgrimiendo su espada) ¿Aquí qué pasa?
Uruk-Hai: ¿QUÉ PASA? QUE AQUÍ TU AMIGO NO PARA DE DARLE AL PICO Y NO SE MUERE.
Argón: Boromir, ¿cómo estás?
Boromir: Estoy bien, aquí me ves, intentando tener una conversación civilizada con este hombre y no hay forma. Le molesta que le hable del Prestige, no quiere luchar conmigo cuerpo a cuerpo... Es un niñato caprichoso. Mira que yo sé que a los niños que se le conceden todos sus caprichos de pequeños luego salen como salen, pero no hay forma. Los padres de hoy no saben criar a sus hijos, con esto de los miedos por la Tierra Cuarto y Mitad de que si se va a acabar, y que...
Argón: (Al Uruk-Hai) O lo matas tú o me lo cargo yo...
Uruk-Hai: ¿Y si tenemos una peleilla antes para que se crea que le defiendes?
Boromir: ... y mira que le dije a mi padre: "Papá, yo de mayor quiero ser artista", pero nada, se empeñó en que fuera guerrero y aquí estoy. Por eso no soy caprichoso, porque mi padre no...
Argón: Puedo hacerte pupa.
Uruk-Hai: No, si da igual con tal de no escuchar a este. ANTES LA MUERTE.

Así pues, Argón y el bicho se pusieron a pelear como dos buenos guerreros, para no dejar insulso el final de nuestra primera historia. El Uruk-Hai era un máquina con el arco, pero sabía defenderse bien con la espada. Así que dio un ataque por aquí, otro por allí, mientras Argón se defendía como podía.

Boromir: ... y por eso invertí en la industria textil. Estos colores no se consiguen tan fácil... ¡Hablando de colores! ¿Cómo hacéis para mezclar los colores cuando hacéis punto de cruz? Yo lo he intentado pero...

El Uruk-Hai le tiró su escudo a Argón para que a este le cortara la cabeza una vez que chocara contra el árbol, pero claro, es nuestro protagonista y no puede morir. Por eso se defendió y se fue para atacar al Uruk-Hai.

Boromir: ... mi madre me enseñó, pero creo..... que la práctica hace...... hace que seamos más diestros en nuestras artes..... y........ y creo que...... estoy perdiendo fuerzas.
Argón: ¡YA ERA HORA! ¡ALABADOS LOS CIELOS! (Al Uruk-Hai) Continuemos.

En un momento de alegría, Argón le cortó el brazo al Hai, y tras eso, le cortó la cabeza, dándole muerte. Esta lucha no fue tan mala como el hecho de haber tenido que aguantar hablando a Boromir durante todo el rato que estuvo hablando mientras ambos peleaban. Cuando fue a atenderle para asegurarse de que se estaba muriendo, comprobó que así era.

Boromir: ... las letras del tesoro están carísimas y... por cierto, se han llevado a los hobbits.
Argón: NO HABLES, por favor, no hables.
Boromir: Noto que me muero. ¿Dónde está Frodo?
Argón: Dejé que se fuera.
Boromir: Hiciste lo que yo no pude hacer. Intenté quitarle el Armario. Vi un mundo tan maravilloso a través de los ojos de una mujer, que no pude resistirme.
Argón: El Armario ya está fuera de nuestro alcance.
Boromir: Sí, sí, mi teléfono es de largo alcance. No permitas que caiga Cóndor.
Argón: No permitiré que caiga la Torrecilla Blanca, ni nuestro pueblo.
Boromir: Eso, eso, dale a la panda la morcilla blanca del pueblo, que está muy buena y tiene menos calorías. Pero siguiendo con el tema, sabes que te habría seguido mi amigo, mi hermano, mi rey...

Y así concluyó la vida de Boromir, el sordeta, el hijo de Cóndor, quien había seguido fielmente a la Comunidad. En ese momento llegaron Legoland y Gimli.

Gimli: Estooooo, ¿qué nos hemos perdido?
Legoland: Pa mí que Boromir l´acaba de diñá. ¿Ande andará Frodo?

Frodo se encontraba en ese preciso momento como ausente, como volando por un mundo desconocido, como... como... como fumándose las semillas de los regalos de Jarlórien. Pero volvió a la realidad cuando empezó a recordar a Gandalf, cómo había muerto, y de pronto la voz del mago le dijo dentro de su cabeza: "Utiliza la Fuerza, Frodo".

Frodo: Yo me vuelvo a mi casa que estaré más a gusto y me quedaré el Armario. No creo que nadie lo note.

Cogió la zodiac y decidió partir de nuevo a la Comarca, justo en el momento en el que Sam, que se había tirado todo el día buscándolo, lo encontró. Frodo ya había avanzado lo suficiente por el río, pero Sam, a pesar de no saber nadar, decidió irse con "su" Frodo.

Frodo: ¡Sam! ¿Qué estás haciendo?
Sam: ¡Tengo que ir con usted!
Frodo: Pero, ¡¡si no llevas los manguitos!!

Sam intentó llegar hasta la zodiac de Frodo, pero no lo consiguió. Al fin y al cabo, eso es lo que quería, ahogarse para que su amo le hiciera la maniobra boca a boca. En esos momentos, Frodo tuvo la duda de si dejarlo allí para que le dejara en paz y dejara de susurrarle canciones empalagosas por las mañanas, pero pensó que tendría remordimiento de conciencia (es más, descubrió que tenía conciencia) y fue a por él porque en verdad se dio cuenta de que si dejaba que se ahogara más, tendría que hacerle el... BOCA A BOCA. No se lo pensó.
Una vez que lo hubo recogido, le dijo:

Frodo: Pero, ¿tú estás loco tío? ¡¡Un poco más y tengo que hacerte el boca a boca, y no es por nada, pero prefiero besar a un gorrino!!
Sam: Hice una promesa señor Frodo: "No pierdas de vista ese hermoso torso". Y no pienso hacerlo.
Frodo: ¡Aaaah! Vale, en ese caso, te dejo venir.

Volvamos ahora a los tres restantes de la Pandi... quiero decir, de la Comunidad. Habían preparado una de las zodiac para echarla a las cataratas con Boromir dentro para darle una muerte honrosa, aunque en realidad, el comentario general fue: "Así nos ahorramos el entierro". Argón cogió parte de la armadura de Boromir, lo cual muestra su fama de choricero Montadito de Lomo. Mientras, Legoland colocaba las zodiac en el agua.

Legoland: Ci zomoh rápidoh alcanzamoh a Frodo en lo que tardah en decí "aquí me peo, aquí me meo".

Pero Argón no hizo ningún gesto para ponerse en marcha detrás de los hobbits para seguirlos y ayudarlos hasta la Carpintería del Pepino, tal y como verdaderos amigos habrían hecho.

Legoland: No pienzah seguirle.
Gimli: Va a ser que no.
Argón: El Armario y Frodo ya no son asunto nuestro.
Gimli: Estoy de acuerdo con que el enano ese no sea asunto nuestro. ¡¡PERO EL ARMARIO SI!!
Argón: No, es que más que nada me he cansado de hacer de niñera.
Legoland: Entonceh...
Gimli: Todo ha sido un fracaso.
Argón: No si nosotros seguimos unidos. Nos vamos a ir de rutas de vinos por toda la Tierra Cuarto y Mitad y ya veréis lo bien que nos lo pasamos.
Legoland: Y, ¿qué paza con Merry y Pippin?
Argón: ¡Uy! Se me había olvidado. En ese caso, vamos a intentar ayudarlos. No los abandonaremos y los seguiremos al tormento y a la mue....... los seguiremos al tormento y los rescataremos. ¿Estamos en temporada de caza?
Gimli: Creo que el pichón está en etapa buena para cazar.
Argón: Pues vamos a cazar algún que otro pichón, palomos, y si se nos presenta algún orco en el camino, también. Vamos a por Merry y Pippin.

Mientras tanto, Frodo y Sam están en las afueras de Mordor (no veas si les ha dado para largo estos dos minutos que ya han llegado casi a Mordor). Al final Frodo no pudo darse el piro de vuelta a casa y tuvo que encaminarse hacia la Carpintería del Pepino para no quedar mal delante de la gente.

Frodo: No creo que volvamos a ver a los otros, Sam.
Sam: No caerá esa breva, señor Frodo. No caerá.

(Créditos)

Directed by:
Wampag & Oriön

Productoras ejecutivas:
Wampag & Oriön

Basado en el libro (ni por asomo) de:
J.R.R. Tolkien

Corrección:
Juani

Adaptación del libro:
Oriön & Wampag

Reparto:

   Frodo    Ozzy Osbourne
   Sam    Jesús Vázquez
   Merry    Andrés Pajares
   Pippin    Fernando Esteso
   Argón    Vin Diesel
   Gandalf   Fernando Fernán Gómez
   Gimli    Torrebruno
   Legoland  Leonardo DiCaprio
Warren  Britney Spears
   Elrond   Carlos Sobera
   Saruman   Christopher Lee
   Galadriel   Lisa Kudrow
Celebrtaion   Matt LeBlanc
Tom Bobmarley  Arnold Chuarcheneger

Fotografía:
Wampag & Oriön

Dirección Artística:
¿Eso qué es?

Sonido:
Oriön & Wampag

Efectos visuales:
La mente de cada uno

Asesores en lenguas:
Zak: el gallo
Oriön & Wampag: el resto

Banda sonora compuesta y dirigida por:
Oriön & Wampag

Banda sonora interpretada por:
Oriön, mi equipo de música Pioneer y mi Royal Philarmonic Nokia móvil

Coros interpretados por:
Oriön & Wampag

Libro aun no disponible

Banda Sonora Original disponible en O&W Records

"Lloraré las penas"      "YMCA"
Interpretada por David Bisbal    Interpretada por Village People

"Conga"       "In the navy"
Interpretada por Glora Estefan    Interpretada por Village People

"Macarena"       "Soy rebelde"
Interpretada por Los Del Río    Interpretada por Jeannete

"Libre"       "Is this love"
Interpretada por El chaval de la peca   Interpretada por Bob Marley

"I shot the sheriff"      "Decile que lo quiero"
Interpretada por Bob Marley     Interpretada por Los Sultanes

"La raja de tu falda"     "El baile de los gorilas"
Interpretada por Estopa    Interpretada por Melody

"El conejo de la suerte"    "Smelly orc"
Interpretada por Elrond y sus muchachos  Interpretada por Phoebe Buffay

"Nueva York se ha apagado"    "Sevillanas del adiós"
Interpretada por Phoebe Buffay  Interpretada por el Coro Élfico de Nuestra Señora de Jarlórien

"Río abajo lo veré"     "Young hearts run free"
Interpretada por Pocahontas    Interpretada por Kim Mazelle

Ningún animal fue maltratado en la realización de este libro... bueno, solo Bill el Poney

Cualquier parecido con la realidad o con personajes reales es pura casualidad.

Queremos dar las gracias a nuestro club de fans (Eli, Cora, Juani y Yoli) por su apoyo incondicional

El viaje continúa en......

EL SEÑOR DE LOS ARMARIOS: LAS DOS PROBETAS

Libros III y IV

¿Pero se puede saber qué haces leyendo hasta aquí? ¿Es que esperabas algo? Bueno, pues sigue hasta el final del documento...

¡Ánimo! Ya falta poco...

Teaser Trailer de "El Señor de los Armarios: Las dos probetas"

Bueno, pues para hacer un avance vamos a tener que echarle un poco de imaginación. Lo vamos a presentar en plan trailer, ¿ok?

Primero imaginemos una pantalla en negro (eso es fácil). Se empieza a escuchar una música un tanto melancólica y van apareciendo algunas escenas.

Empezamos por unas montañas con nieve. Después vemos a Argón, Gimli  y Legoland en un sitio muy verde, con praderas y eso. Aparecen unos jinetes que los rodean. El que parece ser su jefe y que tiene cara de bruto dice:

El de cara de bruto: ¡Mosquis! ¿Qué asuntos traen a un filfo, un hombre y un enano a la Marca? Explicáos.
Argón: Seguimos el rastro de una partida de Uruk-hai hacia el oeste. Tiene cautivos a dos pringados que conocemos.

Se ven escenas de los Uruks llevando a Merry y Pippin. Otra vez se ven los jinetes que dejan ir a los otros tres. El de cara de bruto vuelve a hablar:

El de cara de bruto: Buscad a vuestros amigos pero abandonad toda esperanza. Ésta ha abandonado estas tierras.

Ahora imaginemos una pantalla en negro y una frase que aparece desde el fondo

LA PANDILLA SE HA DISUELTO

Ahora vemos unas escenas de Frodo y Sam en un sitio muy árido, con muchas rocas, vaya, como si estuvieran en el Torcal de Antequera.

Sam: Nos hemos perdido. No creo que Gandalf quisiera hacernos pasar por aquí.
Frodo: No estés tan seguro... con la manía que me tiene...

Aparecen escenas fugaces de Gandalf dándole leña al Balrog. Ahora cambiamos y nos vamos a un bosque. Gimli, Legoland y Argón son cegados por un brillo malva. Aparece Gandalf con vestiduras malvas.

Argón: No puede ser...
Gandalf: Vuelvo a vosotros en los albores de la tempestad, porque sois tan inútiles que sin mí no vais a ningún lado.

Otra frase en fondo negro:

EL PODER DE LA OSCURIDAD AUMENTA (NO NOS REFERIMOS A LOS SITH, ESO ES OTRA PELÍCULA)

Ahora hay muchas escenas fugaces de orcos, de Saruman con el Palantir, del gran "jojo", mientras Gandalf dice: "las tropas de Marsauron han emprendido su ataque. Se vale de Saruman para destruir a tu pueblo."

Vemos a un vejete con pinta de rey, a una chica de pelo rubio en un palacio y un montón de orcos ensañándose con una aldea. La chica rubia cuida de unos niños y dice que estaban desarmados y que nadie los alertó. Gandalf le dice al viejo que debe luchar. El viejo dice que no se arriesgará a una guerra abierta, y que está mal del reuma, así que no luchará. Argón dice que ya le ha sido declarada.

Ahora nos encontramos en Isengard. Saruman está en el balcón de su torre, cual pregonero de la feria con un tío muy feo, mientras dice: "un nuevo poder resurge, su victoria es inminente." Al pie de la torre hay una burrada de orcos listos para entrar en batalla. Se oye la voz de Argón diciendo que es un ejército engendrado con un solo propósito: destruir el mundo de los hombres (anda, que le habrá costado mucho llegar a esa conclusión).

Se empieza a oír "Requiem for a dream". Otra pantalla negra con letras que esta vez dicen

PRÓXIMAMENTE

Vuelve a aparecer el viejo, esta vez a caballo, que le dice a la chica rubia que conduzca el pueblo al Abismo de Helmann´s. En la siguiente escena vemos a la chica caminando junto a Argón y tirándole los tejos.

Chica rubia: Estoooo... ¿estudias o guerreas?

Otra pantalla en negro con más letras

TODOS SERÁN SACRIFICADOS

Ahora hay escenas de Warren con Argón y de filfos que se van de Rivendell: Se oye a Elrond diciendo: "la alianza entre hombres y elfos ha concluido. Estamos hartos de comernos todos vuestros marrones. Nuestro tiempo aquí expira, nos desahucian el mes que viene. El tiempo de Warren se acaba. Déjala ir."

Otra vez pantalla en negro

TODO SE PERDERÁ

Siguiente escena: un bicho de aspecto humanoide es atrapado por Frodo y Sam. Es Gollum. El bicho está de rodillas ante ellos.

Frodo: Ooooohhhh Sam. Mira que mono. Vamos a quedárnoslo. Seguro que sabe cómo llegar a Mordor.

Pantalla negra de nuevo

SI NO LUCHAN TODOS CONTRA EL MAL

Lo que viene ahora es bastante confuso. Son muchas escenas muy cortas de muchas cosas distintas. Aparecen orcos llegando al pie de una muralla, Argón con una espada, se oye a Saruman diciendo que no habrá amanecer para los hombres, Legoland surfeando por una escalera, orcos trepando a un muro, Frodo con una espada y cara de poseso, orcos cabalgando sobre una especie de perros, se escucha a Sam diciendo: "el Armario, lo está poseyendo." Vemos a Frodo cayéndose de morros en un charco, más escenas de Rivendell, escuchamos a Warren preguntando a su padre que qué ha visto, que él tiene el don de la premonición. Elrond le dice que él no va a volver, y que se busque otro novio. Se ven más escenas de guerra, olifantes, a Gollum saltando, a algo agarrando a Merry, y de fondo la voz de Gandalf diciendo que las defensas han de resistir, y Argón le contesta que resistirán. Aparece la chica rubia buitreando otra vez y tocando la cara de Argón y a Sam agarrando de la mano a Frodo. Se oye a Elrond diciendo a Warren que aquí ya no queda nada para ella, y ella le dice que queda esperanza. Vemos a alguien sobre un caballo blanco en una colina y a Argón abriendo unos portones con una pose muy chula. Pantalla negra de nuevo:

El Señor de los Armarios
Las dos probetas

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