El Elegido

LA SEPARACIÓN

Tras regresar de las tierras de los hombres Fryg y Soul se incorporaron a sus filas, pero aún Fryg tenía dudas acerca del portero, que había venido con los reyes hombres, su papel era aún insospechable.

Los reyes hombres fueron recibidos en secreto bajo la oscura sabana de la noche, una brisa fría bañaba lentamente todo el terreno infértil, los pocos árboles estaban secos y no hacían el intento por vivir, los reyes fueron escoltados hasta el castillo de Rougdur por un serie de caminos infértiles y de tierra negra como si todo un hermoso bosque hubiese sido quemado por días enteros sin poderlo apagar, los ancianos llegaron por fin a la cámara de Rougdur, dentro del gran castillo que parecía mas bien una prisión construida dentro de una gran montaña retorcida con una piedra muy dura. Nadie habló durante el trayecto.

Al entrar a la cámara había una mesa oscura y ovalada con cuatro sillas en forma de serpientes peleando, y otro par de sillas junto a los tres vitrales con solo unos ojos rojos muy fuertes y no con referencia al color, sino que al verlos todos los temores de la vida se convertían en realidad cada vez que pasaba la luz, junto a esos había una especie de balcón hecho de cemento pintado en negro, y una silla muy grande sobre el, donde un hombre de cabello largo y negro, de piel blanca y una nariz aguileña y cejas no pobladas, pero con una mirada muy penetrante y unas manos enredadas en mangueras oscuras que parecían inyectarle algo.

- siéntense, señores de otros reinos, yo Rougdur amo y señor de la oscuridad he sido liberado de la prisión creada por el báculo gracias a los titanes, esta prisión fue erigida  junto con el encierro  del báculo, se preguntarán cual encierro, sí la maldición fue hecha 20 años  después de mi encierro, pero en esos veinte años yo perdí todo mi poder y el báculo era la única cosa que me podía sacar de ahí, pero sólo si era libre y ese báculo fue condenado a la esclavitud y no fue nunca más libre hasta hoy que por un error casual un mago dejó que el báculo lanzara su rayo y ese primer estruendo llegó hasta aquí rompiendo mis cadenas .

El propósito de mi inesperada invitación fue que al saber que el Báculo estaba libre, podíamos usarlo para gobernar todo Emáruc, solo que necesito su apoyo para juntar nuestros ejércitos y terminar de una vez por todas con  los Elfos y así...

- un momento señor Rougdur si acabamos con los Elfos, ¿que podremos gobernar si ellos no están?- dijo Pentor con una gran presencia
   
-Ser señores de toda la tierra de Emáruc - dijo Rougdur como si nadie hubiese hablado. Con respecto a su duda señor Pentor, matar a todos los elfos será un deleite, y liberaremos a todas las criaturas que han sido encerradas, eso será lo que gobernaremos y con el poder de la vida bajo nuestro control, seremos dueños de todas las tierras del Infinito.

Ninguno de los hombres reaccionó a la propuesta de Rougdur, un largo silencio reinó en la habitación hasta que Melrok se levantó y dijo con una voz vieja y apagada - Señor, yo no dudo de su misma grandeza y astucia para crear planes, pero la gloria total del reinado que propone será para usted y no para nosotros. Siento que solo nos usará a nosotros como frente y escudo de los golpes que su prodigioso plan, seremos la carroña que los enemigos comerán mientras usted está a salvo bajo la tierra. Así que por conclusión mía yo no acepto su plan y gracias por la información del báculo. - terminando de decir esto el hombre decrepito se sentó y colocó su cabeza sobre la mesa.

-Pentor, amigo tu que piensas - dijo Rougdur muy duramente.

-Solo digo, que hay algo extraño en la muerte de los reyes, la maldición no necesariamente necesitaba su muerte para romperse, solo que renunciaran al trono y usted sería liberado.

-Tenéis toda la razón, y si te es necesario saberlo yo maté a los reyes, solo para demostrar que mi reino había regresado, recuerdo ese momento muy bien: Todo estaba totalmente oscuro, era la primera vez que sentí en mucho tiempo, pensé que tenía los ojos cerrados pero ni eso, solo era un nube de humo, pronto escuché estas palabras muy claras: ES LAMENTABLE DECIR ADIOS A ESTE REINO, esas palabras me hicieron carne y hueso, la tierra retumbó y fui expulsado como carroña, esas palabras me decían estas libre. Cuando salí de la tierra todo estaba mojado y mi cuerpo desnudo tenía frío. Entonces vino mi fiel vasallo y utilicé mi poca fuerza para matar a los reyes. La famosa nube negra que crea cosas extrañas desde que salió de Kemendur era yo indicando mi grandiosa victoria.

-Gracias contestó Pentor, pero aún estoy en desacuerdo con tus planes y buscaré el Báculo por mi mismo- al decir esto el hombre recargó sus codos sobre la mesa y sostuvo su cabeza.

-Lo que quieres evitar Rougdur, es que destruyan el báculo, lo tienes seguro, porque ninguno de nuestros enemigos sabe que el báculo es indestructible si no está completo, y tu sabes a lo que me refiero, y tampoco desplegará todo su poder, es por eso que fallaste porque el báculo nunca estuvo listo y tu idea aún no me gusta así que yo buscaré la gema roja- dijo Reprot quedándose de pie.

Muy bien - dijo Rougdur, más joven de lo que se le había visto, su cabello estaba negro y su piel era morena con ojos muy verdes. - Ninguno quiere cooperar a mi reinado, sufrirán todos ustedes malditos, morirán dolorosamente, desde este momento les declaro la enemistad por 70 siglos multiplicados por 7, a siete generaciones suyas les caerán las dolorosas llagas de Tougdur, mi prisión y también morirán.- De las manos de Rougdur salieron rayos color amarillo en dirección a los hombres, pero ellos se pusieron de pie y sacaron sus anillos con ojos de serpientes y comenzaron a atacar a Rougdur después de unos segundos los reyes desaparecieron pero seguían siendo enemigos. Ahora ya eran cuatro buscando el Báculo.

Después de toda la confusión el acompañante de los reyes se había quedado ahí viendo a Rougdur que estaba de espaldas gritando maldiciones y llamando a su sirviente manco, después de un corto rato la criatura manca llegó y como sabiendo todo lo pasado y pensando no miró al acompañante humano y dijo- señor tengo listo todo, su plan sigue en pie pero en distintos caminos.

- Bien, muy bien llevadme a la cámara que tú sabes.

Al pasar por la puerta, el portero se escondió detrás de la mesa tirada y con la mascara en sus manos la rompió y dijo entre murmullos y sollozos de dolor - es... hora... de... decir la verdad... tengo que detenerlos- y se volteo a unos de los vitrales y vio el bosque de Lock y sintió que lo llamaban, miró fijamente ese lugar y pronunció un hechizo - Sombrre imer back Lock en luz (para saber que significa este hechizo regresa unos capítulos) en ese momento la luz del pequeño sol  lo tocó y desapareció